sábado, 4 de abril de 2009

Semana Santa y May

Parece sencillo hablar, decir lo que otros hacen mal, incendiar con palabras la ya maltrecha situación que vivimos, lo difícil es abolir con hechos lo antes dicho, lo complicado es ser ejemplo, y convencer, y ser de una palabra, cuando no se logra, la deformación es inminente, y el charlatan regresa a ser la basura que nunca dejó de ser.
Javier May Rodríguez, actual presidente municipal de Comalcalco, se ha deformado y tal parece ya no busca salvar su honor, su palabra, si no más bien su negocio, su capital, convertido en lo que tanto critico, se observa desentendido, fastidiado, desconfiado de su entorno, con ojeras, pero no como la de quienes trabajan, hacen el amor, o se divierten, más bien de quien pasa por una etapa de crisis animica, y moral.
A Javier May lo agobian los ecos de sus palabras, lo asusta hasta el vuelo de una mosca, Comalcalco ya no es el mismo, tiene más cantinas, tiene más delincuencia, tiene más resentimiento.
Semana Santa llegó, y esperemos haya un espacio de reflexión para que el actual alcalde entienda y vea que el infierno arde en el actual ayuntamiento municipal y que su paso por el mismo, ha sido nefasto, decepcionante para los propios perredistas, y para ellos mismos, aunque dejen las arcas vacias.