Lo que vimos y vivimos los dos días y noches que estuvimos en las calidas playas de Paraíso, es una libertad descarriada por momentos, pero a la vez una manera de coexistir asombrosa, pues a pesar de dos o tres simulacros de agarrones, no pasó a más, pues la misma multitud los rechazaba y los hacia a un lado.
Lo que si es que la juventud ha cambiado mucho, la generación actual es menos desinhibida, por lo tanto es más proclive al error, pero no por eso deja de aprender la lección, el sexo, y el alcohol es cosa cotidiana, y también la droga, la marihuana, infinidad de sustancias deambularon en el ambiente de estos días de semana santa en la playa de Paraíso.
Los desnudos, creo que mientras más habían, más se acostumbraba la gente al mismo, es decir, la morbosidad se vuelve monótona, el desnudo, los homosexuales, las miradas, esas miradas que inundan más que el mismo ambiente sensual.
Por momentos daban lástima, otra ternura, pues se veían desprotegidos, tratando de hacer lo que ven en la TV o en la Internet, queriendo copiar hasta el último momento erótico que sus mentes les dicta. Es asombroso ver como la noche transforma la conducta del ser humano, y también hay que ver mejor al tabasqueño, reprimidos en diferentes índoles, tan reprimidos que cuando se sienten libres, no distinguen o no quieren distinguir hasta donde termina la libertad.
Siendo concreto, más que encausar mis comentarios a sectores culpables o inocentes, creo parte de lo que hoy ocurre es en gran manera culpa de la familia, es decir la responsabilidad recae, en quienes se han olvidado de inculcar valores, y han dejado en segundo lugar lo importante.
Por otro lado el exhibicionismo ya se va haciendo normal en nuestros tiempos, en donde están las cámaras en los celulares, y en donde la tecnología se vuelca a ellas, creo mucho más cosas se verán, pero que antes no se grababa, pero que si existía, lo único que no creo que tengan quienes son tomados, es una conciencia o criterio propio de cómo lo verá su grupo social luego de lo difundido.
En fin, por lo pronto podemos decir a ciencia cierta, que en nueve meses habrá un mayor número de bebes en el estado, y que la próxima SEMANA SANTA será mejor que esta, pues no hay mal que por bien no venga. Por cierto ya existen algunos adelantados, que repartieron su propaganda .
Otra de las cosas que me dejó impactado es que las señoritas que supuestamente tienen pedigree, y que tienen una mejor educación y económicamente están sustentables, dan cada sorpresa, pues hubo una que casi se agarra con un borrachito, y otras que parece que en lugar de escuelas van a tomar clases de Teibol, pero bueno los tiempos han cambiado, singnificativamente para bien de quienes gustan del sexo feménino, a las que le gusta el sexo másculino, pues siguen igual, pues la verdad, ya el Macho Macho, más bien se defiende, ya ni pelea.
Hoy por hoy el desmadre si se le quiere llamar así lo hacen las mujeres, dueñas del siglo XXI. Amén.
Lo que si es que la juventud ha cambiado mucho, la generación actual es menos desinhibida, por lo tanto es más proclive al error, pero no por eso deja de aprender la lección, el sexo, y el alcohol es cosa cotidiana, y también la droga, la marihuana, infinidad de sustancias deambularon en el ambiente de estos días de semana santa en la playa de Paraíso.
Los desnudos, creo que mientras más habían, más se acostumbraba la gente al mismo, es decir, la morbosidad se vuelve monótona, el desnudo, los homosexuales, las miradas, esas miradas que inundan más que el mismo ambiente sensual.
Por momentos daban lástima, otra ternura, pues se veían desprotegidos, tratando de hacer lo que ven en la TV o en la Internet, queriendo copiar hasta el último momento erótico que sus mentes les dicta. Es asombroso ver como la noche transforma la conducta del ser humano, y también hay que ver mejor al tabasqueño, reprimidos en diferentes índoles, tan reprimidos que cuando se sienten libres, no distinguen o no quieren distinguir hasta donde termina la libertad.
Siendo concreto, más que encausar mis comentarios a sectores culpables o inocentes, creo parte de lo que hoy ocurre es en gran manera culpa de la familia, es decir la responsabilidad recae, en quienes se han olvidado de inculcar valores, y han dejado en segundo lugar lo importante.
Por otro lado el exhibicionismo ya se va haciendo normal en nuestros tiempos, en donde están las cámaras en los celulares, y en donde la tecnología se vuelca a ellas, creo mucho más cosas se verán, pero que antes no se grababa, pero que si existía, lo único que no creo que tengan quienes son tomados, es una conciencia o criterio propio de cómo lo verá su grupo social luego de lo difundido.
En fin, por lo pronto podemos decir a ciencia cierta, que en nueve meses habrá un mayor número de bebes en el estado, y que la próxima SEMANA SANTA será mejor que esta, pues no hay mal que por bien no venga. Por cierto ya existen algunos adelantados, que repartieron su propaganda .
Otra de las cosas que me dejó impactado es que las señoritas que supuestamente tienen pedigree, y que tienen una mejor educación y económicamente están sustentables, dan cada sorpresa, pues hubo una que casi se agarra con un borrachito, y otras que parece que en lugar de escuelas van a tomar clases de Teibol, pero bueno los tiempos han cambiado, singnificativamente para bien de quienes gustan del sexo feménino, a las que le gusta el sexo másculino, pues siguen igual, pues la verdad, ya el Macho Macho, más bien se defiende, ya ni pelea.
Hoy por hoy el desmadre si se le quiere llamar así lo hacen las mujeres, dueñas del siglo XXI. Amén.
