Uno de los lugares en donde empezaron sus operaciones los perredistas fue en las Rosas, en donde según comenta nuestro enviado especial Mariano Jiménez, se perdió.
Fue tanta la angustía, pues ahi tenian su centro de operación los del PRD, que tuvieron que traer porros y demás malandros para no permitir el paso a nadie e intimidar a todo priísta que vieran a las afueras de su casa.
Es decir se implemento un toque de queda, y a la vez, se intimido a las personas, quienes no salieron a votar por miedo a estos descarados y atolondrados gansteres.
Por si fuera poco según mencionan nuestros reporteros en ese lugar estuvieron cuidando como perros, algunos trabajadores perredistas del ayuntamiento, entre los que más espuma por la boca hecho dicen se encontraba el Noruego, quien hasta hoy día, dicen sigue buscando el hueso, pues al actual ya no le siente sabor. Seguiremos Informando.
