miércoles, 6 de mayo de 2009

Oscar Rosado Jiménez, representa la escoria del PRD

Lic. Román Jiménez García

Renunció por fin Oscar Rosado Jiménez a la secretaria del H. Ayuntemiento de Comalcalco, para coordinar la campaña a César Francisco Burelo, cosa que extraña, pues hasta el día de hoy el que intenta posicionar en la Perla de la Chontalpa al candidato del PRD a la diputación federal, es el político peor posicionado en la entidad.

Por ello es ridiculo intentar siquiera el pensar que Rosado es quien posicionará a Francisco Burelo, creo los dos se irán al mismo hoyo, sin embargo la necedad y desfachates de los actuales administradores es tan grande, que luego de dos años y meses de campaña a favor del moribundo Oscarito por parte del ayuntamiento, parece que todo señala a la eminente derrota y al ridiculo, pues Rosado y May, son políticos circunstanciales, y de la misma manera llegaron y así, también entre esa mediocridad será su partida.

Moisés Sánchez Chávez, seria ratificado por el cabildo municipal, tras la renuncia del ex tesorero de Andrés Manuel López Obrador, el cual por cierto se reunirá con el en la gira que este tendrá por la Villa de Tecolutilla, en donde desde temprano estuvieron convocando a la gente cautiva con la carne y las despensas para asistir a este acto político.

Segun datos manejados por su equipo serán 14 mil vales de carne, con 36 mil 600 despensas, vales de gas, Javier May, tratará de ganar la elección federal y municipal, siendo ya un discurso de sus operadores que este ira a una diputación plurinominal en el congreso del estado, negociaciones que se hizo para dejar pasar a Francisco Burelo.

De tal manera, Oscar Rosado Jiménez, intenta hacer política a la antigua, pasandose las leyes por donde no le da el sol, algo que ellos criticaron y que hoy realizan sin el menor decoro. Lo que si se vaticina al interior del partido es una derrota inminente, un ridiculo ocasionado por ficciones y malos manejos que desdeñan y descubren la política mafiosa, amañada y cobarde de quien se dice el mécanico de la izquierda progresista. Javier May Rodríguez, un muñeco de trapo, manipulado por sus mismos temores, por sus mismas pasiones, por su misma miseria. En pocas palabras un don nadie, queriendo ser profeta.