jueves, 4 de junio de 2009

ANULO MI VOTO

El próximo 5 de Julio se llevarán a cabo elecciones en Jalisco. A nivel federal elegiremos diputados, a nivel estatal diputados locales y a nivel municipal, alcaldes y regidores. Ante este escenario los ciudadanos tenemos 3 opciones:1. Votar por algún partido político.2. Anular el voto.3. No votar.
¿POR QUÉ INVITAMOS A ANULAR INTENCIONALMENTE EL VOTO?• Porque una elección que debería ser trascendental para la vida pública del Estado, es en realidad un circo grotesco de políticos partidistas, peleando por posiciones de poder y control del dinero y decisiones públicas. Estos partidos ya no tienen la capacidad de conducirnos hacia una democracia de calidad.• Porque el voto nulo en México no tiene ningún valor jurídico y queremos darle significado político.• Porque es tarea vital que los ciudadanos comprendamos que el dinero y decisiones que los políticos manejan de manera deshonesta e ineficaz son nuestros.Sabemos que la anulación de votos no cambiará nada el 5 de julio, ya que en nuestra inservible ley electoral (creada por los corruptos diputados locales y federales provenientes de todos los partidos políticos), aunque vote sólo el 10% del padrón habrá ganadores. Esto es un signo más del cáncer democrático del país. Sin embargo, nos proponemos ejercer nuestro derecho de votar rechazando a todas las opciones partidistas y candidatos.Creemos que tomar partido y votar por la oposición supone (en el mejor de los casos) entregar el mandato a una opción política seguramente igual de incapaz y probablemente igual de corrupta (dada la falta de condiciones para actuar de manera diferente) lo que ha demostrado la paupérrima oposición en Jalisco y el ejercicio de gobiernos y congresos de tercera en otros estados y municipios de la República. Los datos de confianza institucional demuestran el descrédito generalizado de la ciudadanía hacia los partidos políticos.Consideramos que tiene mayor valor político anularlos a todos que participar en una competencia entre incompetentes. Haciendo una analogía, votar por un partido en nuestro país es elegir entre padecer cáncer o hepatitis C, o morir en la horca o por inyección letal; es aceptar la condena de vivir secuestrados por los partidos.Con el abstencionismo tenemos un denominador común. TODAS LAS OPCIONES PARTIDISTAS nos parecen inaceptables. La abstención es a todas luces comprensible, pero en definitiva no la compartimos debido a las vidas que costó ganar el voto universal. Tratamos de pensar en perspectiva y creemos que abstencionistas y anulistas (quienes proponemos anular intencionalmente) somos una abrumadora mayoría. La abstención tiene el riesgo de ser interpretada como apatía por los políticos y fortalece su creencia de que hagan lo que hagan, no habrá consecuencias. Sabemos que el abstencionismo no necesariamente significa apatía, es también una postura política fundada en la evidencia de que votar no sirve de nada.Tratamos de acelerar el proceso de construcción democrática del país que nos parece impostergable y en donde más tarde o temprano necesitaremos votar. No existe ninguna democracia sin sufragio universal, referéndum, plebiscito, revocación de mandato, así como mecanismos permanentes de control social sobre Lo Público. Levantarnos a anular nuestro voto nos convierte en ciudadanos ejerciendo el derecho de rechazar la nulidad de los partidos y sentar las bases para construir una mejor democracia. El Instituto Federal Electoral y el Instituto Electoral y de Participación Ciudadana del estado de Jalisco, tienen la obligación de explicar al votante que además de tener el derecho de elegir a un partido específico tiene también el derecho de no votar por ninguno.