Román Jiménez García
En reiteradas ocasiones, hemos mencionado lo desprotegido que está el sureste del país en cuanto a seguridad se refiere. A su vez hemos hecho un llamado serio a las autoridades competentes, a los alcaldes y gobernadores, para atacar este problema creciente y que no tiene hasta el día de hoy un alto.
Cuando digo atacar, es buscar soluciones, estrategias, para tener mejor protegida a la población, y a la misma autoridad.
A su vez también es del conocimiento público, que la mayoría de negocios de giros negros pasan una cuota a los narcotraficantes, identificados como “Z” y que dichos grupos delictivos hacen lo que quieren al interior de los municipios.
Sin embargo hasta el día de hoy no se ha hecho nada. Sigue imperando la corrupción en los elementos judiciales, y municipales, no ha existido una estrategia por parte del gobierno federal, no le han puesto un tapón al drenaje de aguas negras que se ha convertido el sureste.
Para muestra un botón, hace siete días, para ser más exactos el día Miércoles primero del presente mes, fue plagiado el empresario paraiseño William Alamilla Pérez, al llegar a su domicilio ubicado en la cerrada “Los Girasoles”.
Y la mañana del lunes 6 del presente mes fue encontrado el cuerpo sin vida del famoso empresario tabasqueño, quien fue dejado en la ranchería el Habanero, del municipio de Cunduacán, cubierto de unas sabanas y con el tiro de gracia en la cabeza.
Según un diario estatal informó que el monto que sus plagiarios pedían para su liberación, era de 10 millones de pesos, y aunque se dio 5 millones los malhechores no se tentaron el corazón y asesinaron al empresario Paraiseño.
Por otro lado cabe agregar que infinidad de cibernautas del municipio de Paraíso, se mostraron molestos por la actitud de algunos medios informativos, pues aseveran debido a la desinformación y al no premeditar el contenido de sus notas, provocaron que los asesinos tomaran la decisión de asesinar a William Alamilla.
Una vez más queda en evidencia la decadencia de nuestras autoridades, y pone en entredicho las posiciones políticas en el estado, nadie, nadie quiere entrarle al tema del narcotráfico en el estado, todas las autoridades soslayan su responsabilidad.
Sin embargo el desfile de políticos a estos tugurios es algo cotidiano en Paraíso, en donde se conflagran o se incendian los supuestos estadistas de más abolengo y sobriedad en el estado.
Ojala de igual forma puedan afrontar los retos que este tiempo nos demandan, y que por fin den garantías a quienes en verdad quieren progresar, quizá no con empresas de giro negro, pero sí de una manera más honesta, pues este es solo un ejemplo de muchos, que hoy de manera mensual están pasando su comisión al narcotráfico, que hoy por hoy le tiene ganada la plaza a la Secretaria de Hacienda y Crédito Publico.
