miércoles, 9 de abril de 2008

¿Quién los encampana?

Los Muchachitos de Granier
Lic. Román Jiménez García

Luego de las vicisitudes y demás sucesos que ha sorteado el gobierno de Granier. Aparecen como los jinetes del Apocalipsis los suspirantes priístas que sin el menor recato en medio de la desgracia polarizan y dañan la labor del actual gobernador del Estado de Tabasco.
El priísmo de Comalcalco se sigue segregando y mucho tiene que ver la desesperación de los suspirantes, quienes en un afán de convencer y hacerse de más simpatizantes, utilizan como figura central al gobernador Andrés Granier, adjudicándose ellos mismos ser la línea del primer priísta del Estado.
Nadie quiere quedarse fuera, y le apuestan a la confusión, en medio de la reconstrucción. Sin temor, sin ambages, los superantes caminan mientras tropiezan a su gobernador.
Esto ha provocado por lo menos en Comalcalco, un denigrante escenario político en donde la figura dañada empieza a ser Granier.
¿Pero quién le metió esa idea en la cabeza a los suspirantes? ¿Quién los está encampanando? ¿Acaso Mayans, Gina o será el mismo Granier? O es quizá una mala interpretación. Lecturas erróneas. Visiones. A lo mejor inseguridad u otro atentado en medio del reacomodo.
Me atrevo a pensar, que posiblemente el químico Granier no ha sabido o no ha encontrado el puente de dialogo idóneo con algunos cabos sueltos del PRI.
A pesar de los llamados continuos que el gobernador ha hecho a los adelantados, nadie ha claudicado y siguen haciendo del trabajo del Chelo, el trampolín de sus ambiciones.
Entonces ¡Qué ocurre, por qué no hay disciplina? ¿A caso los dirigentes del partido están haciendo mal su trabajo? Creo que a sabiendas que en Comalcalco, la realidad fue diferente a lo esperado, la reacción de muchos políticos, ha sido la de resguardarse en la figura casi, si no es que totalmente paternalista del gobernador, y como buenos hijos desobedecer las ordenes de quien manda en casa.
Por el otro lado está la posición del químico, quien con discursos intenta calmar el intempestivo carnaval de suspirantes. A mi parecer ha faltado por ese lado mano dura, pues existen en su administración, suspirantes que abiertamente trabajan para beneficio propio, dejando de lado la confianza que se les dio en su momento, cuando nadie daba un peso por ellos.
Ese amigo y amiga lector, es otro de los retos del químico, el mantener a raya, no sólo a sus compadres, si no también los desbordados ánimos de algunas personas de su gabinete que hoy más que nunca caminan firmes hacia lo que anhelan y sueñan, mientras los de menor rango no vean que se predica con el ejemplo, de nada servirán los discursos y jalones de oreja.
Para Andrés Rafael Granier Melo, no ha sido nada fácil estos años al frente del gobierno del estado, ha luchado como un titán en contra de lo que otros gobernantes no se han atrevido y hasta el momento no se ha rajado, ni mucho menos se ha hecho para atrás. Firme en sus posiciones y decisiones. Sólo le ha faltado la respuesta esporádica y avasalladora de su equipo y de algunos priístas que no han entendido… por eso unos se van y otros llegan, por eso algunos dentro del gabinete se ven mediocres y opacados con la responsabilidad y el tiempo que les está tocando vivir.
Pocos han entendido que de aquel Madracismo y Andradismo han quedado pequeñas brisas y que todo se empieza a unificar en corrientes diferentes que desembocan la mayoría en un solo hombre, que no es Mayans, ni Evaristo.
Por ello, por congruencia, por ética (si se tiene) y por lealtad, los que aspiren a un puesto de elección deben y están obligados a renuncias antes que el descrédito sea más grande que sus ambiciones.
En la misma posición y para aclarar las cosas, el químico debe dejar de prescindir de personas que no entiendan lo que pasa Tabasco y de la importancia de su gobierno.
Si no, el contrapeso, hará sucumbir el trabajo hasta ahora hecho y la reconstrucción será más individualista y política que general y convincente. Porque hasta ahora la mayoría de los suspirantes han declarado, algunos públicamente otros de manera más intima, que son la línea del gobernador y como se comportan, sin recibir una reprimenda seria, parece ser o que todos han sido engañados o que Granier, no sabe o no puede controlara sus muchachitos malcriados.